22/4/08

FIESTA DE LAS LENGUAS HISPANICAS


Miguel de Cervantes Saavedra, novelista, poeta y dramaturgo español. Supónese que nació el 29 de septiembre de 1547 en Alcalá de Henares y murió el 22 de abril de 1616 en Madrid (fue enterrado el 23 de abril, y popularmente se conoce esta fecha como la de su muerte).
Su padre, se llamaba Rodrigo de Cervantes y era cirujano, de ascendencia cordobesa y de antepasados gallegos. Su madre fue Leonor de Cortinas Sánchez, de quien poco se conoce.

No realizó estudios universitarios. Vivió en Valladolid, a partir de 1551, y padeció la prisión a causa de sus deudas.

En 1566, se traslada a Madrid, donde concurre al Estudio de la Villa, dirigido por el catedrático de gramática Juan López de Hoyos, quien en 1569 publicó un libro, donde incluye tres poesías de Cervantes.

Fue camarero del Cardenal Giulio Acquaviva, defensor del cristianismo en la batalla de Lepanto, donde perdió la movilidad de la mano izquierda. De ahí procede el apodo de “ el manco de Lepanto”. Sin embargo, tras seis meses de permanencia en un hospital de Messina, Cervantes reanudó su vida militar en 1572. Fue cautivo esforzado y paciente en Argel, fracasado proveedor de la frustrada Armada Invencible, pero siempre y en todo, el más poderoso observador en los mil caminos de su vida y el más genial creador de fantasías. El novelista por antonomasia, encarnación del artista cristiano moderno.

Contrajo enlace el 12 de diciembre de 1584, con una joven de menos de veinte años, Catalina de Salazar y Palacios, pero el matrimonio no prosperó. Cervantes inauguró en la literatura española el tema controvertido del divorcio, visto con disfavor en un país católico.

Se radicó en Sevilla, para trabajar luego como cobrador de impuestos, y a causa de esta actividad fue acusado de defraudación al no poder devolver el dinero recaudado, por haberlo depositado en un Banco que quebró. Esto motivó su encarcelamiento, y desde su celda comienzó a escribir “Don Quijote de la Mancha”.

En esta novela inmortal de caballería, versión de un mundo de alto ideal y amasada en un sentimentalismo sublimado hasta lo absurdo, la novela de caballería fue la pasión de un siglo. En esta obra aparecen más de seiscientos personajes que se mueven en torno a la pareja inimitable de Don Quijote y Sancho, considerados como encarnación de la antinomia entre el idealismo y el empirismo, aunque a veces lleguen casi a identificarse e interferirse psicológicamente, sin que cada uno de ellos deje de ser fiel a su personalidad.

La primera parte, aparece publicada en 1605 bajo el nombre “El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha”. La segunda parte aparece en 1615, “El ingenioso caballero Don Quijote de la Mancha”.

En 1613, había publicado “Novelas ejemplares”. Estas doce novelas son el primer intento de novela corta orientado en diversos aspectos: como novela romántica, nos cuenta los amores y dolores, intrigas y equivocaciones de diversos personajes. Nueve Novelas Ejemplares pertenecen a este grupo: “La gitanilla”, “La española inglesa”, “La ilustre fregona”, “Las dos doncellas”, “La fuerza de la sangre”, “La señora Cornelia”, “El amante liberal”, “El celoso extremeño” y “El casamiento engañoso”.

Como cuadro de costumbres, de orientación satírica, en el cual el argumento cede el lugar a la descripción del escenario social, del ambiente moral, puede citarse “El coloquio de los perros” y “El Licenciado Vidriera”.

Con respecto a la novela picaresca resultó una de las tres formas de mayor importancia, junto a las novelas de caballería y la pastoril. Ejemplo de este género es “Rinconete y cortadillo”, presentación del mundo del hampa, donde se conjugan candor y picardía, ingenuidad y desenfado.

Sin embargo, la primera novela publicada por Cervantes, fue “La Galatea”, escrita en seis libros, en 1580. En ella, además de la buena prosa, hay aún mejores versos de amor platónico, en los cuales, como en todas sus novelas, revela Cervantes su afición por la poesía. Varias veces prometió una segunda parte, y aún la recordó en su lecho de muerte. Fue traducida a varias lenguas europeas.

En 1617, aparecen “Los trabajos de Persiles y Segismundo”. Según la opinión de Pfandl: “Su sentido cristiano del casto amor, que hace de la mujer no el premio, el objeto-fin, sino la compañera de las pruebas, la que sufre con el amado”.

Los protagonistas son personajes ideales, milagros de pureza, hermosura, prudencia y nobleza, no dominados nunca por la vulgaridad. Sin llegar al estudio detallista de la novela psicológica, describe las reacciones del amor, del odio, la esperanza, la alegría, el dolor y la amistad.

Su obra poética comienza con las cuatro composiciones dedicadas a “Exequias de la reina Isabel de Valois”. Otros poemas fueron: “A Pedro Padilla”, “A la muerte de Fernando de Herrera”, “A la Austriada de Juan Rufo”. Como poeta sin embargo destaca en el tono cómico y satírico, y sus obras maestras son los sonetos “Un valentón de espátula y greguesco” y “Al túmulo del rey Felipe II”.

Como dramaturgo, “La Numancia”, es una tragedia de inspiración nacional.

Los “Entremeses”, entre los cuales figuran “El retablo de las maravillas”, “Los dos habladores”, “La cueva de Salamanca”, “El Vizcaíno Fingido”, “El Juez de los divorcios”, “La guarda cuidadosa” y “El viejo celoso”, muestran gran acierto en su composición y animación.

Falleció en Madrid, el 22 de abril de 1616.

ASESINATO DE MARTIN LUTHER KING

El 4 de abril de 1968 King fue asesinado en Memphis (Tennessee). Pero sus ideas siguen vigentes, porque su sueño, hacer realidad el arrollador movimiento de los derechos civiles, aún no es una realidad completa.

El 4 de abril de 1968, el pastor Martín Luther King fue asesinado de un balazo en la ciudad de Memphis, en Estados Unidos. Su muerte provocó graves disturbios en más de 100 ciudades de ese país e hizo que se convirtiera en un mártir de la lucha por los derechos cívicos y la igualdad racial.

Martin Luther King nació el 15 de enero de 1929 en Atlanta (Georgia). Hijo del Reverendo del mismo nombre, llegó al mundo en una habitación de la casa en la Avenida Auburn.

Durante los primeros 12 años de su vida vivió en una casa victoriana de dos pisos. Fue ordenado ministro baptista, como su padre, a los 17.

En 1951 se Graduó en el Crozer Theological Seminary, y realizó estudios de posgrado en la Universidad de Boston. Allí entró en contacto con las ideas del pacifista y nacionalista hindú Gandhi, las cuales se convirtieron en el centro de su propia filosofía de vida y lucha política.

La prioridad del movimiento de King fue la de no responder a la violencia con más violencia. Esta lógica fue entendida como estrategia principal de su resistencia.

En 1963 se puso al frente en Birmingham (Alabama) de una campaña a favor de los derechos civiles para lograr el censo de los votantes negros a los que se les había prohibido el ejercicio de su derecho. Durante su misión de lucha fue arrestado varias veces.

Protestar contra la discriminación

En concordancia con estas ideas, en 1955 formó parte de un boicot contra una compañía de transportes públicos en Montgomery, en la que se había cometido la injusticia de provocar el arresto de una mujer negra que se había negado a dejar su asiento libre para que un pasajero blanco se sentara.

En medio de la protesta que se generó por el suceso, Martin Luther King dijo: "No tenemos otra opción que la protesta. Han sido muchos los años de notable paciencia, hasta el punto de que, en ocasiones, hemos dado a nuestros hermanos blancos la impresión de que nos gustaba el modo en que nos trataban. Pero esta noche estamos aquí para liberarnos de esa paciencia que nos ha hecho pacientes con algo tan importante como la libertad y la justicia".

La protesta se llevó a cabo durante 381 días y a consecuencia de ello, Martín Luther King fue arrestado y encarcelado, su vivienda fue destrozada y recibió muchas amenazas de muerte.

En 1956 los seguidores de este revolucionario norteamericano pusieron fin a las protestas al conocer la ordenanza del Tribunal Supremo que prohibía la segregación en el transporte público de la ciudad.

Tras éste éxito conseguido con el boicot de Montgomery, Martín Luther King fundó la Conferencia de Líderes Cristianos del Sur (SCLC) junto a los clérigos negros de todo el Sur de la nación. Este paso le permitió participar en el liderazgo nacional del movimiento de los derechos civiles de su país.

"Yo tengo un sueño"

El 28 de agosto de 1963 Martin Luther King brindó su discurso "Yo tengo un sueño" en los escalones del monumento a Lincoln en Washington.

En esa maravillosa intervención expresó: "Debemos enfrentar el hecho trágico de que el negro todavía no es libre. Cien años después, la vida del negro es todavía minada por los grilletes de la discriminación".

"Cien años después, el negro vive en una solitaria isla de pobreza en medio de un vasto océano de prosperidad material. Cien años después el negro todavía languidece en los rincones de la sociedad estadounidense y se encuentra a sí mismo exiliado en su propia tierra", dijo entonces.

Ese día, 200 mil personas que habían marchado junto a él en apoyo de los derechos civiles, le oyeron pronunciar también: "Sueño con el día en que esta nación se levante para vivir de acuerdo con su creencia en la verdad evidente de que todos los hombres son creados iguales". En 1964 le otorgaron el Premio Nóbel de la Paz.

A pesar de todo fue objetado por los hombres de su misma raza. En Chicago, los baptistas negros locales se le opusieron públicamente. También allí los manifestantes plantaron bandas de blancos, dirigidos por miembros del Ku Klux Klan, que provocaron enfrentamientos.

El 4 de abril de 1968 King fue asesinado en Memphis (Tennessee). Pero sus ideas siguen vigentes, porque su sueño, hacer realidad el arrollador movimiento de los derechos civiles, aún no es una realidad completa.

Según el Centro de Información sobre la Pena de Muerte de Washington, desde 1976 sólo 12 hombres blancos han sido ejecutados en Estados Unidos, mientras han corrido con la misma suerte 180 negros.

Además, el Centro afirma que uno de cada diez negros de 25 a 29 años (un 9,7 por ciento) se encuentra en la cárcel, contra el 2,9 por ciento de los latinos y 1,1 por ciento de los blancos de la misma edad.

También la pobreza afecta mucho más a los negros que a los blancos: 22,7 por ciento de los primeros vive por debajo de la línea de pobreza, contra 11,7 por ciento entre los blancos.