22 de febrero de 2008.- Mi hermano gemelo, Amado, así como su estirado mayordomo, me han insistido para que deje un vestigio de lo que fue el blog de 'El Sibarita'. Voy a hacerles caso y recuperaré de hoy en adelante las poesías/entradilla. En el fondo soy un sentimental.
Volveremos a la calle a mirar transeúntes y también nosotros seremos transeúntes
VUELTA AL RUEDO. RODOLFO CHIKILICUATRE
Rodolfo Chikilicuatre. (Foto: EL MUNDO)
Que viva la democracia virtual. Que vivan los referendos informáticos. Que viva la madre que nos parió. El pueblo español es sabio y no anda escaso de memoria. Escarmentado por las sucesivas decepciones eurovisivas, y ya que nuestros prebostes audiovisuales no tienen los arrestos de mandar dicho festival a freír espárragos, esta vez ha optado –el pueblo español, digo- por rizar el rizo y votar masivamente a Rodolfo Chikilicuatre, colaborador de Buenafuente y autor de la melodiosa canción conocida como 'El baile del chiki chiki'. Así es, a escasos dos días de que se cierre la página de Myspace destinada a este asunto, casi dobla en sufragios al segundo clasificado, por lo que inevitablemente accederá a la final de cinco canciones en la que se va a decidir quién será nuestro representante en Belgrado, donde tanto nos quieren últimamente.
Ya el año pasado se perdió una excelente oportunidad, con las Supremas de Móstoles, para hacerle una enorme pedorreta a este fiasco musical donde las afinidades raciales o políticas son más importantes que las artísticas. Además, qué nos importa perder o ganar. Lo que necesitamos es un revulsivo pachanguero, lo que necesitamos es un escándalo, un desprecio torero en forma de humorista con peluquín rockero y guitarra de juguete. Debemos hablar al mundo en un lenguaje global que todos entiendan. Igual que ocurrió con el 'la, la, la', 'La Macarena' o el 'Aserejé'. El chiki chiki forma parte de ese esperanto rítmico y, por tanto, ya es un clamor que no puede pasar inadvertido: Rodolfo Chikilicuatre a Eurovisión. Lo que nos vamos a reír. Tabueno.
